CIUDADCARACAS
CCS
VIERNES 7 JUNIO 2013
07/06/13.-La imagen de Cipriano Castro
sentado en un antiguo sillón rojo en el que su cuerpo reposa pero su mente se
encuentra sumergida en una laguna de sueños y pesadillas es una de las escenas
de la película La planta insolente, producida por la Fundación Villa del
Cine.
El maestro del séptimo arte venezolano Román Chalbaud es el
encargado de dirigir el filme histórico inspirado en la revolucionaria vida
política de Castro, quien es interpretado por el experimentado actor Roberto
Moll.
“Estamos muy contentos de que hoy en día se pueda llevar la
historia a los televidentes porque es muy importante conocerla. La historia nos
permite enterarnos de todas las cosas que han pasado, aprendemos a descartar
las mentiras que nos han contado y, además, no cometemos los mismo errores”,
manifestó el cineasta.
La cinta narra el esfuerzo realizado por el dirigente que se niega
a ceder ante las continuas presiones de los caudillos, banqueros, empresas
transnacionales y de los acreedores de la deuda externa. La planta insolente
también recrea el bloqueo de 1902, cuando una flota de 15 acorazados
provenientes de Inglaterra, Alemania e Italia bombardearon las costas
venezolanas como medida de presión para el cobro de la deuda pública.
ENCARGO
DEL COMANDANTE
El largometraje es el resultado de una idea que manifestó el
Comandante Hugo Chávez al historiador Luis Britto García y al cineasta Chalbaud
en 2009, durante el estreno de la película Zamora, tierra y hombres libres.
“La noche del estreno de Zamora en el Teatro Teresa Carreño,
Chávez se dirigió a Britto García y le preguntó: ‘¿A usted le gustaría escribir
un guión sobre la vida de Cipriano Castro?’, y él le dijo: ‘Sí’. Después, se
dirigió hacia mí y me preguntó: ‘¿A usted, Chabaud, le gustaría dirigir esa
película?’ y le dije: ‘Sí’. Eso fue hace cuatro años y hoy ya es un sueño hecho
realidad”, recordó el director.
Para Chalbaud, el guión de La planta insolente es una creación
magnífica de Britto García debido a que es un filme histórico poco tradicional
que combina los aspectos poéticos con la imaginación sin alejarse de los hechos
reales.
“En el guión, Britto García plasmó que Castro tenía pesadillas y
eso nos permite una gran libertad para los juegos cinematográficos. También
reflejó que tenía un gran sentido del humor y, lo más importante, es que no
desconoció los errores del general”, explicó.
Con nueve meses de preproducción debido al alto grado de
dificultad del filme, la cinta se comenzó a grabar el pasado primero de abril y
se tiene previsto que culmine los últimos días de junio.
Las escenas de esta obra poco convencional que incluye la creación
de efectos especiales y hasta toques de fantasía producidos por la mente de
Castro se realizarán con el respaldo de la productora argentina Sociedad Post.
El rodaje se desarrollará en diversos lugares de Maracaibo,
Carabobo, Lara, Falcón y Miranda. Además, se realizarán algunas grabaciones en
Ecuador.
MOVILIZACIÓN
ACTORAL
Una centena de actores y más de 60 extras integran el elenco de
esta producción cinematográfica que busca reivindicar la figura del general
tachirense.
Roberto Moll, Hans Christopher, Jean Franco de Marchi, Luis Pérez
Pons, Israel Moreno, José León, Frank Silva, Carlos Delgado, Emiliano Molina,
Jorge Canelón y Juliana Cuervos son algunos de los actores que participan en la
obra número 22 de Chalbaud y que se estrenará el próximo año.
“Cipriano es un personaje que ha sido vapuleado por la historia y
eso está mal hecho. Él fue un gran nacionalista y un hombre que defendió la
soberanía venezolana porque este era un país portátil que siempre se vendía
para afuera con pueblo y todo, pues ninguna riqueza quedaba aquí. Castro se
enfrentó a una oligarquía terrible y se enfrentó a la burocracia”, dijo Moll.
Asimismo, señaló que su preparación para este papel fue un reto
debido a la bipolaridad del general Castro y a la recreación de las batallas
que implicaron una preparación muy especial en el manejo de armas.
Para el actor Hans Christopher, quien interpreta a Tello Mendoza,
un comisionado que se hizo millonario otorgando concesiones en el mandato de
Castro, trabajar en La planta insolente con Chalbaud es un honor porque la
cinta permite que los venezolanos se empapen de los hechos históricos del país.
TRANSFORMACIÓN
HISTÓRICA
La planta insolente no sólo ha sido un reto histórico para el
director y los productores, pues los maquilladores también se han enfrentado a
las exigencias del guión.
Las barbas canosas y espesas, el cabello abundante, los tonos
pálidos en los rostros de las féminas y las máscaras de látex que representan
los episodios oníricos de Castro, son algunos de los elementos que caracterizan
el maquillaje de los personajes.
“Nosotros tenemos que adaptarnos a los requerimientos del director
e investigar las características de cada personaje para que sean lo más reales
posibles”, explicó el maquillador David Morales.
MARÍA
DE LOS ÁNGELES AGUILAR/CIUDAD CCS
FOTOS NANCY CERVANTES/CIUDAD CCS
FOTOS NANCY CERVANTES/CIUDAD CCS